Hace unos cuantos años todo estaba meridianamente (y restrictivamente) claro para los ciudadanos españoles: SÓLO PODÍAMOS REGISTRAR NUESTRO BARCO EN ESPAÑA. Así, sin más. Nos sometíamos a nuestra legislación y punto.
Pero al deber armonizarse con las leyes europeas, nuestra legislación tuvo que abrir las puertas y permitir que sus ciudadanos pudieran registrar sus embarcaciones bajo otras banderas europeas.
Así, comenzó poco a poco un flujo de salida hacia otros países de nuestras banderas, migrando a otras más "amables", o menos exigentes que la nuestra.
Nuestra bandera española, a la que, por nuestro particular carácter, nos hemos empeñado en atiborrar a requisitos cada vez más nimios, intentando controlar hasta la vigencia del material de seguridad de a bordo, cuando otras banderas dejaban toda esa cuestión bajo la entera responsabilidad del armador de una forma lógica.
De tal manera que las banderas más simples y menos exigentes (Bélgica, Holanda...) han cuadruplicado el número de nuevos registros anuales, gran parte de ellos procedentes de España. Tanto es así que el número de embarcaciones registradas en dichos países superaba el propio número de sus habitantes... un dato que hacía a esas autoridades marítimas replantearse su política de puertas abiertas.
Y, claro, los demás países son perfectamente libres de marcar sus límites a la hora de registrar embarcaciones por extranjeros...
Es lo que ha hecho recientemente Bélgica, por ejemplo, que ya no permite la matrícula de embarcaciones a la titularidad de extranjeros de menos de un 50% de nacionalidad belga.
Y recientemente en Holanda acaban de prohibir la asignación de Licencia de Radio y números MMSI a ciudadanos no holandeses. Es cierto que ello no afecta a las matrículas holandesas, pero siguiendo esta tendencia, no nos extrañaría que en un futuro lo hiciera.
Esto, unido a la búsqueda de la Administración Marítima Española de alguna fórmula mágica que haga retornar las embarcaciones que cambiaron de bandera a sus colores (anteproyecto en discusión, que busca aplicar la exigencia del material de salvamento y náutico a las embarcaciones titularidad de españoles, tengan la bandera que tengan), nos hace pensar que en un plazo que no sabemos si será medio o corto, se volverán a remover los cimientos de nuestra legislación marítima.
De momento, las embarcaciones belgas han tenido que cambiar de bandera.
Atentos a las novedades....
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